[Juego] Informe de batalla Ídolo de Gorko (II)

Saludos, señores de la guerra.

Hoy tremos el segundo informe de batalla de «El ídolo de Gorko», de Warhammer 5ª edición, de parte de Víctor González HiIdalgo.

Snagga se removía intranquilo sobre su jabalí de guerra al tiempo que la flatulenta criatura bufaba y pisaba la tierra, notando el estado de su jinete. El jefe le había encargado mantener a todo refuerzo lejos de la zona donde los zonroa’oz se estaban reuniendo, pero de momento no había aparecido nadie.

Llevaba dos dias a la espera y, por mucho que dijeran que había partida un mensajero hacia la ciudad de los zonroza’oz no había rastro alguno de refuerzos… ¿o sí?

Una polvareda se empezó a elevar en el norte y, momentos después, Oglich se presentó a todo galope ante él a lomos de su lomo plateado. La bestia gruñó al jabalí, quién bufó con fiereza dando un paso al frente obligando al goblin a tirar de las riendas de su lobo para evitar un enfrentamiento

Vienen zonroza’oz, jefe. Traen cañonez y un montón de guerreroz… y un tipo muy raro zobre un caballo…. parece un mago- dijo el jinete de lobo con la respiración acelerada

Ya era hora que llegaran. Aviza a loz muchachoz, ezta noche cenaremoz bien – añadió el orco mientras palmeaba el lomo de su jabalí, haciendo que una nube de polvo y moscas saltara al aire

Si lograba acabar con los refuerzos el kaudillo seguro que lo recompensaba y nadie volvía a discutir sus órdenes… solo esperaba que ese mago no le diera demasiados problemas antes de poder acabar con él


El sol ya estaba alto cuando los humanos aparecieron por el camino; un nutrido grupo de soldados y caballeros escoltaban sus preciadas maquinas de guerra mientras el mago repasaba los textos antiguos que hablaban sobre la corona recuperada… ninguno de ellos imaginaba que los ojillos rojizos de Snagga los observaban desde la distancia, oculto en la loma de unas pequeñas elevaciones cercanas.

Cuando la columna estaba justo en su posición el Gran Jefe orco se encaramó a su belicoso jabalí de guerra, se reunió con sus chicos y, alzando su rebanadora, vociferó un profundo y gutural grito para dar inicio al ataque.

Turno 1 Orcos y Goblins

¡¡WAAAAAAAGH!!

El grito retumbó por entre las colinas cercanas, haciendo que una bandada de pajaros alzara el vuelo, mientras la horda se lanzaba al ataque. Como una marea de musculo y colmillos los jinetes de jabalí bajo el mando de Snagga subieron la colina al galope viendo como Blogart los flanqueaba por un lado y el carro de lobos por el otro. Traqueteando por encima de la otra colina, la vagoneta sntoling se unió al frente mientras la infanteria avanzaba a todo correr por el valle entre las colinas.

Con una sonora carcajada, Ulag alzó su lanza y ordenó al conductor de su karro que iniciara el avance en medio de una nube de polvo y flatulencias de los dos jabalíes que tiraban del artilugio… tal fue el estrépito que causó que los jinetes de lobo se quedaron boquiabiertos mirando, permaneciendo en su posición sin avanzar un solo paso, aprovechando algunos de ellos para apostar a ver cuánto tardarían los humanos en destrozar el karro con sus máquinas de guerra.

Turno 1 Imperio

– ¡Emboscada!- empezó a vociferar Ulrich sobresaltando a Zorn, sumido en sus estudios, cuando los pielesverdes empezaron a emerger por entre las colinas cercanas

La columna de marcha rápidamente se movilizó para hacer frente a la amenaza goblionide, encarándose todas las unidades hacia los emboscadores mientras los artilleros colocaban en posición de disparo el cañón de salvas y el mortero. Con un rápido batir de alas, el héroe imperial en pegaso se situo frente a Snagga y sus jinetes de jabalí en un intento de desviar su atención de Ulrich y Zorn, provocando que dos delirantes fanáticos salieran dando tumbos de los goblins cercanos.

Siguiendo la estela del héroe en pegaso, los herreruelos trotaron para intentar proteger el valioso cañón de salvas de posibles cargas mientras amartillaban sus pistolas con la mirada fija en los desquiciados goblins que daban vueltas.

Turno 2 Orcos y Goblins

Snagga, quien no se podía creer la osadía de aquel humano, ordenó a sus chicos que cargaran contra el caballo alado mientras la delirante vagoneta, viendo que aquello iba a ser divertido, puso rumbo hacia el mismo objetivo.

Blogart, por su parte, deseoso de verte también sangre, espoleó a su jabalí contra los herreruelos a la par que el carro goblin, cuya tripulación se percató que los humanos no los veían y, encima, iban a ser atacados por el frente por el brutal jefe orco. ¡Esa era su oportunidad!

Viendo la que se les venía encima, los jóvenes herreruelos decidieron que aquello era demasiado para ellos. Una cosa era buscar el favor de sus padres haciendo maniobras con el ejército, otra muy distinta enfrentarse a un orco enorme sediento de sangre y a un carro tirado por lobos a toda velocidad. Dando media vuelta, los jinetes humanos emprendieron un rápido galope que los llevó lejos del campo de batalla… se dice que, a dia de hoy, aun están corriendo.

En medio de burlas y mofas, los goblins del carro tiraron de las riendas viendo como no tenían a nadie a quien cargar mientras el furioso Blogart hincó espuelas en su jabalí y aceleró hasta entrellarse contra el cañón de salvas.

En el centro, los fanáticos hicieron honor a su nombre y mientras uno moría entre espumarajos sanguinolentos el otro empezaba a dar tumbos erráticamente hacia los orcos, quienes se detuvieron a escasos pasos de él mientras le escupían y amenazaban con sus enormes rebanadoras a dos manos. Los goblins, riendo por lo bajo ante aquello, avanzaron para cubrir el flanco de Snagga mientras los snotlings imitaron a sus primos encapuchados y avanzaron alegremente.

En el flanco izquierdo, los jinetes de lobo se decidieron a avanzar cuando Ulag, a bordo de su enorme carro, empezó a amenazarles si no hacían algo mientras él mismo y los grandotes se acercaban peligrosamente a las líneas humanas.

El choque entre la vagoneta y el pegaso se saldó con el caballo alado troceado entre los mecanismos de la vagoneta, mientras los pequeños pielesverdes saltaban inocuamente sobre el jinete desmontándolo, provocando que los jinetes de jabalí y su monturas fallaran todos sus ataques al golpear el lugar donde antes estaba el humano… por fortuna, Snagga reaccionó a tiempo y logró hundir una vez su rebanadora en el cuerpo del humano, recibiendo a cambio igual regalo.

Viendo como los jinetes de jabalí se disponían a trocearlo, el héroe imperial dió media vuelta mientras la vagoneta lo perseguía de cerca y Snagga reprimía a sus chicos para mantener la posición… quería ver como el humano era troceado desde una distancia prudencial.

En cuanto a Blogart, su furia fue tan desmedida que pese emplear su arma mágica, niguno de los artilleros cayó a sus pies, haciendo estos se envalentonaran y le plantara cara un turno más al menos mientras la frustración lo consumía….

Turno 2 Imperio

La avalancha pielverde ya esta casi sobre las filas imperiales, pero el sacrificio del noble pegaso sirvió a Ulrich para tener vía libre para cargar contra los infelices goblins nocturnos que defendían el flanco de los jinetes de jabalí mientras el mortero, los arcabuceros y los ballesteros se disponían a abrir fuego para diezmar a los belicosos pielesverdes.

La atronadora carga de la caballería imperial logró destrozar a la unidad de encapuchados goblins, que siquiera pudieron huir de los feroces jinetes antes de ser pisoteados. Envalentonados por la masacre los caballeros prosiguieron su carga hasta estrellarse con el flanco de los jinetes de jabalí de Snagga… pero algo no marchaba bien ya que el Gran Jefe Orco sonreía ampliamente mientras los veía acercarse… que tramaría?

El combate entre Blogart y la dotación del canón de salvas se zanjó, esta vez, con el desenlace esperado y dos de los artilleros murieron a manos del iracundo Jefe Orco, huyendo el artillero restante mientras el jabalí del pielverde se daba un festín con los restos. A su lado, el héroe imperial perseguido por la vagoneta huyó del campo de batalla creyendo que ya todo estaba perdido.

Impertérritos ante la cobardía de unos de sus supuestos líderes, los arcabuceros abrieron fuego sobre la vagoneta, logrando causarle graves daños y dejarla en pie a duras penas. En el flanco contrario, los ballesteros y el mortero abrieron fuego sobre los jinetes de lobo que se encogieron al escuchar el silbido de la máquina de guerra… más un enorme fuego artifical hizo aparición sobre sus cabezas de forma inocua cuando el proyectil estalló antes de tiempo, provocando las risas de los goblinoides. Unas risas que pronto se convirtieron en gritos de dolor y gorgoteos ahogados cuando varias saetas de plumas negras atravesaron sus cuerpecillos, derribando a la mitad de la unidad haciendo que el resto se lo pensara mejor y diera media vuelta para no volver a reagruparse en todo lo que quedaba de partida.

Turno 3 Orcos y Goblins

Alzando su rebanadora, Snagga dio la orden de cargar por el flanco a la unidad de orcos armados con enormes hachas a dos manos sobre el flanco de los caballeros mientras el carro de lobos y la vagoneta lo hacían por el lado contrario, cerrando así la trampa que debería acabar con la peligrosa unidad imperial.

Maldiciendo y burlándose de los goblins en lobo, Ulag dio orden al conductor de su carro de jabalíes para que cargara contra el mortero, mientras que los orcos grandotes intentaban una lejana carga contra el destacamente imperial que tenían enfrente. Los snotlings, viendo a sus enormes primos correr hacia los humanos, hicieron otro tanto sin darse cuenta que el fanático restante estaba dando tumbos en esa dirección… lo que acabó en un baño de sangre; los grandotes, desternillándose ante como los snotlings saltaban despedazados en todas direcciones perdieron empuje a medio camino, quedándose allí quietos mientras amenazaban a los humanos para que vinieran a por ellos si se atrevían.

El jabalí de Blogart, ahíto de carne humana, rezongó cuando su jinete hincó espuelas para que persiguiera al último superviviente de la dotación del cañón de salvas, quien viendo como la mole de músculo y colmillo lo fijaba en su diminuto cerebro, corrió como alma que lleva el diablo huyendo del campo de batalla mientras Blogart lo perseguía de cerca.

Ulag, en su carga contra el mortero, demostró porque son temidos los carruajes y trituró por completo a la dotación en un sangriento espectáculo. Tal era la velocidad del carro que éste prosiguió a toda velocidad, dejando atrás la devastada máquina de guerra, situándose en la retaguardia imperial

En el centro del campo de batalla, Ulrich alzó su espada para desafiar a Snagga, quien creyéndose ya el vencedor aceptó sin pensar en las consecuencias mientras la carnicería entorno suya se cobraba la vida humanos y pielesverdes; cuando los gritos se disiparon y la polvareda se asentó, se pudo ver como casi la totalidad de la unidad de caballeros había sido aniquilida (solo el carro goblin causó 7 heridas, de las cuales entraron 4!) y solo un par de jinetes de jabalí yacían sin vida en el suelo. Pese a ello, la lanza partida de Ulrich sobresalía del pecho de Snagga, que había quedado ensartado en su propio jabalí por la violencia del golpe recibido.

Alzando el rostro, y ante la asustada mirada de Zorn, Ulrich tocó retirada evitando así que los brutales orcos los rodearan por completos y completaran la carnicería… pero tal era la cantidad de enemigos que los caballeros restantes, Zorn y el propio ulrich poco pudieron hacer para huir y fueron masacrados por la espalda por los vengativos jinetes de jabalí que, en su ímpetu, no vieron al fanático que aun daba vueltas por la zona, sufriendo varias bajas más por su impulso asesino.

Pero el daño estaba hecho. La columna de refuerzos había sido diezmada, la valiosa artillería había sido destruida y el apoyo mágico que debería haber aportado Zorn yacía ahora ensangrentado a los pies de los orcos, que ya habían iniciado el pillaje y desmembramiento del cuerpo.

Grotfang se pondría contento ante aquellas notícias, pero debería nombrar a un nuevo subalterno que liderara a sus tropas en su ausencia… sin duda Ulag había cumplido con creces y era el que más números tenía de ser ascendido, no como el furibundo Blogart, que aun estaba golpeando el enorme cañón de salvas, descargando sobre el ingenio mecánico su frustración, por no haber caído ante su primera carga.

Conclusiones

Snagga / Victor: El escenario hay que reconocer que era muy propicio para los pielesverdes e intenté al hacer la lista explotar el hecho de tener un primer turno de avance sin que me pudieran disparar máquinas de guerra, ballesteros o arcabuceros (que era lo que más daño podía hacerme) colocando unidades veloces en los flancos para intentar acabar con las unidades de disparo y las máquinas de guerra

Los lobos tenían que haber llegado a por una máquina de guerra, Blogart en su jabalí junto a los jinetes de Snaaga haber hecho trizas a los caballeros y el carro goblin cazar otra máquina de guerra, la infantería y la vagoneta deberían haberse trabado con la infantería enemiga y haber atraído disparos sobre ellos mientras los fanáticos inmovilizaban (o dañaban a los caballeros)

Todo muy bonito sobre el papel pero, nada más comenzar la batalla vi que las cosas se torcerían…. para empezar el héroe en pegaso que no me esperaba para nada frenando a los jabalíes y dejándolos a tiro de los caballeros, además de sacarme a los fanáticos demasiado lejos de las líneas imperiales. Luego los lobos sacando un 1 en animosidad en el primer turno, que rompía el avance conjunto de ese flanco… tocó improvisar

Por suerte, los caballeros acabaron cayendo en una encerrona donde los goblins nocturnos eran el cebo (aunque salió por muy poco, ya que los orcos y el carro casi no llegan a la carga!) y los dos jefes adicionales acabaron con las máquinas de guerra y dándome la victoria por muerte súbita. De haber seguido, creo que la partida estaba bastante decidida a mi favor, quedándo en mi contra únicamente las dos unidades de disparo, el bloque de espadachines y el detacamento para frenar a prácticamente todo mi ejército.

Nueva victoria para los pielesverdes que niegan los refuerzos a los imperiales, haciendo que las temidas máquinas de guerra (y Zorn, con su amuleto negro, y Ulrich, con el cuerno de Urgok) no puedan participar en la última batalla

Ulrich / Pablo: Creo que tendría que haber llevado arqueros y más herreruelos buscando hacer más pantallas y redirecciones, por otra parte, a nivel de despliegue, tenía dos opciones meter a Zorn en la caballería y tenerlo protegido o meterlo en un flanco y esperar a que los pielesverdes no llevaran proyectiles. No creo que hubiera una decisión mejor que la otra, en este caso me salió mal.

Sobre la decisión más importante de la partida que fue cargar a los goblins debería haber tenido mejor ojo, porque por muy pocos centímetros no arrasé hacia adelante, quedando la caballería en la retaguardia fuera de la linea de visión de todo el mundo… lo que llevó al carro a poder cargarme y destrozarme a la unidad. Si hubiera podido irme detrás de las lineas pielesverdes, podría haber salvado a Zorn (y Ulrich)

También, la huída de los herreruelos muy mal medida… mi problema en esta partida fueron las mediciones; es que el despliegue es muy complicado porque el escenario me obliga a desplegar todo en la línea de marcha pero además desplegué de una forma muy mala.

Si repitiera la partida usaría mas arqueros, mas herreruelos y tendría mas ojo con las cargas y redirecciones.

Espero que para la siguiente partida, que me obliga a llevar una lista perra se me dé mejor.

6 comentarios en «[Juego] Informe de batalla Ídolo de Gorko (II)»

  1. Lo he disfrutado mucho!! Una duda de las fotos.. Los carros y la vagoneta no sufren daño por pasar por donde pasan?? Enhorabuena. Esperando el siguiente.

  2. Hola!
    El carro y la vagoneta (la furgo!) no psufren daños porque todo eran colinas
    Un saludo!
    PD: En breve haremos la tercera, que los pielesverdes lo tienen bastante cuesta arriba… y luego la gran batalla final!

  3. Desde luego estas antiguas campañas de la 5a edición son una gozada

  4. Muy chula la partida, el Imperio aqui lo tenia realmente dificil, hace muchos años qu eno juego a fantasy, pero siempre me parecio que el Imperio contra los Orcos y Goblins llevaba las de perder a no ser que lograsen bajarlos bastante a base de proyectiles, y aqui viendo que empezaban de por si en posicion de marcha, y que los OyG llevaban que si carros, que si jabalies y lobos… sinceramente no se como podia ganar ahi el imperio cuando sus bloques se iban a comer o una u otra carga de esas cosechadoras de carne.

    Ver estas partidas me dan unas ganas de volver a jugar fantasy que…

  5. Muchas gracias por los informes 🙂 los estoy disfrutando muchísimo. ¡Me están dando ganas de jugar de nuevo estas campañas!

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